¡ESTA VEZ SI!
Genial sensación nos ha quedado a Irene, Carlos y a mi mismo tras disfrutar de la escalada de ésta magnífica vía, el diedro de Hoz de Jaca.
Esa vía que tantas y tantas veces había visto en la carretera, al tomar la curva de izquierdas en el embalse de Búbal :)
Esa vía a la que fui unos años atrás y me acojoné al asomarme (en frio) a su cumbre, y es que no es una vía normal.. tiene la peculiaridad de que primero se llega a la cima (mirador de Hoz de Jaca) y de ahí, se hacen unos rápeles para descender hasta la base de la misma.. hasta el mismo pantano, para posteriormente comenzar a escalar.
El pasado Lunes fue el cumpleaños de Carlos, y como llevaba una temporada comentándome de subir a tachar de la lista esta escalada, y después de unas tandas en los karts :) le dije de subir este domingo.
Dicho y hecho, a las 9:30 de la mañana y como un reloj coincidimos Carlos y yo que subíamos de Zaragoza con Irene, que bajaba de dormir por Anayet...
Lo primero organizar el material.. y acto seguido.. Foto de cima!
Enseguida Carlos monta la instalación del primer rápel y comenzamos a descender hasta la base
Una vez en la base Irene decide que quiere empezar ella con el primer largo, se hace unos ochos perfectos y empieza a escalar a tope!
La verdad que el largo más difícil lo resolvió ella, como una titana! primer largo de 40 metros :)
Una foto de la terraza con vistas al pantano.. mientras otra cordada rapela la vía.
A mi me toca el segundo largo, con una sonrisa de oreja a oreja de lo bonito y disfrutón que es.. 35 metros de poner piececitos y buscar el canto.. geniales.
Carlos, que está muy fuerte, decide empalmar los 2 últimos largos en uno, que también son impresionantes, coincidimos en que lo más bonito de la vía por sus pasos aéreos y semidodesplomes que te dan sensación de estar escalando una vía por encima de tu nivel.. y disfrutando!
Irene llegando a la reu final..
Ya estamos en la cima de nuevo! Genial la escalada!!
Una vista para abajo del diedro..
Y a reponer energías y comentar la jugada.
Hacía tiempo que no disfrutaba tanto escalando una vía, todo un regalo por el lugar, la compañía y la actividad, Gracias!
El único pero que tengo, es lo guarra que puede llegar a ser la gente.
Supongo que ojos que no ven, corazón que no siente.. Al descender al pie de vía, el pequeño tramo de bosque entre la pared y el agua del embalse, aparece como si de un vertedero se tratara.. y es que cuando acercas una carretera a un lugar bonito (en este caso un mirador) siempre hay gente que disfruta dejando su huella en forma de porquería en la naturaleza.
Reseña de la vía: